26.1.12

UNA NOTICIA SOBRE INCLUSIÓN


No voy a definir la Inclusión. Hay miles de enlaces en Internet donde informaros sobre el tema.
Aquí tenéis un sitio donde podéis informaros y participar en su petición. 


Os pido una vez más vuestra firma. 


La Inclusión es un DERECHO  de todos los niños y niñas, de TODOS.

Sean cuales fueran sus capacidades, sus diversidades, su heterogeneidad es un valor. Un valor que enriquece, y la escuela tiene que adaptarse a ella para incluir.

La escuela y la vida.

El sistema educativo nos prepara para la vida, y crea mundos. De ella depende que el mundo sea inclusivo.
Los niños no son Peter Pan, crecen y se hacen jóvenes, adultos. Han de sumergirse en otros mundos, vivir nuevas experiencias, formarse, trabajar, convivir, vivir.

En la medida en que la escuela cree esos mundos serán más inclusivos o excluyentes. Es sencillo.

Por eso no es solo de la Escuela de lo que hablamos, es el Mundo lo que tenemos que convertir, que transformar para incluir.

Dicen que “la infancia es el patio donde jugamos el resto de nuestra vida” y durante ese tiempo la Escuela es el hogar de nuestras vivencias. Es por tanto importante como y de qué manera vivimos esta etapa en nuestra vida porque el resto de nuestras experiencias estarán teñidas de ella.

No hago más que leer y escuchar noticias tremendamente dolorosas sobre la exclusión y lo complicado que resulta la Inclusión de los niños y niñas con TEA.

Es curioso que la mejor manera de ver la verdadera realidad sea acercarse a nosotros, a quienes vivimos con TEA.  Cuando conoces a las personas con TEA y sus familias es cierto que te contagias.

Comienzas a ver las cosas de otro color, que no es un rosa mojigato, ni un negro de luto.

Ves las cosas de color azul, el color de la superación, del proyecto diario, del esfuerzo continuo por comunicar, de la tenacidad.

Te das cuenta que un mal día solo es eso, un mal día, y después sale de nuevo el sol y comenzamos de nuevo, superándonos otra vez, sin mirar atrás.

Cuando te rechazan te haces fuerte y tus armas son mostrarte al mundo, hacerte visible con una sonrisa. 

Aprendes a comprender lo incomprensible, disculpas la ignorancia y la atacas con información.

Los mitos duelen pero los combates con presencia, vuelves a mostrarte, a enseñar la realidad, la verdad.

Y funciona, quienes están cerca de estas actitudes  son contagiados, como pintados de azul.  Se convierten en piezas de nuestro puzzle.

Hay quien dice que los niños y niñas con TEA son difíciles de incluir en la escuela ordinaria. Que hay muchos “grados”.

Con los  recursos necesarios TODOS cabemos en la escuela porque TODOS tenemos derecho a caber.

¿Quieren decir estas personas que las personas con diversidad funcional son entonces difíciles de incluir en el mundo?

Los argumentos necesarios para convencer sobre Inclusión no pueden ser más sencillos. Funciona allí donde se ha implantado.

Y lo más importante ES UN DERECHO reconocido.


Yo tengo una noticia sobre Inclusión. No será impactante, pero para nosotros hoy ha sido una gran noticia .

Sorprende lo que cuesta llegar a las personas que desde las administraciones públicas tienen en sus manos la educación inclusiva. Y cuanto más te alejes de quienes trabajan a diario con los alumnos peor.

No conseguimos que Inspección entienda la necesidad de una AL a tiempo completo para nuestro centro. 

Las familias no entienden la exclusión en otros lugares y forman parte de la Inclusión de nuestro hijo.

En la clase de Ángel, primero de Educación Infantil,  hay una actividad que se titula “El protagonista de la semana”. Durante una semana cada alumno/a es el protagonista de todas las actividades y los papás acuden un día de esa semana a explicar la historia del niño (el porqué de su nombre, donde nació, como se llaman sus abuelos…) y a contar un cuento a la clase.

Los papás de Marcos han compartido hoy esta actividad con la clase y han contado el cuento “Los 7 cabritillos y el lobo” y lo han hecho con pictogramas.




Ángel venia hoy contentísimo con su cuento de pictos y lo hemos leído en casa todos juntos.

Esto es INCLUSIÓN, cuando las familias adaptan el material para que llegue a todos, A TODOS.

Si unos padres son capaces de hacer esto que parece tan complicado para algunos, adaptar para incluir, porqué le  resulta tan difícil a las administraciones.

Para nosotros es una gran noticia sobre Inclusión y es gracias al trabajo y las ganas de toda la Comunidad Educativa a la que PERTENECEMOS.

Sirva de ejemplo para los que no creen que sea posible.

Hay una pintada en la puerta del cole que cita: “Lo imposible solo tarda un poco más”
Juro que no he sido yo.

Gracias a los papás de Marcos por hacer posible esta gran noticia, con familias así a nuestro lado el Infinito se nos va a quedar corto.



16.1.12

CUMPLEAÑOS FELIZ

Mi pequeño príncipe ha cumplido cuatro añazos.

¡Cómo crece!  Se hace mayor, hace nada que contaba su edad en meses y cabía entre mis brazos mientras dormía.

Cuando cumplió un año miraba la luz de la vela de la tarta ensimismado como todos los niños.

Cuando celebramos los dos años, seguía mirando igual la vela pero no soplaba, su hermano era más rápido y le ayudaba. No abría los regalos, le daban igual, ni siquiera romper el papel le llamaba la atención y no jugaba con los juguetes nuevos.  Sin embargo, podía quedarse toda la tarde absorto con un cubierto de plástico.

El año pasado ya con la noticia del TEA (aunque el diagnostico oficial llego en marzo) todo cobraba sentido. Pero para ser sincera la primera vez que nos hablaron de posible TEA, que para nosotros fue el comienzo de esta aventura  (fue en septiembre) estaba demasiado cerca y era doloroso comprobar que se repetían las mismas actitudes.

Era el momento de las preguntas: ¿soplará la vela o no la soplará nunca? ¿Algún día jugará con los regalos o nunca le llamarán la atención? ¿Cantará algún día el cumpleaños feliz? ¿Tendrá amigos que invitar a sus cumpleaños o solo lo acompañará su hermano?

Con el corazón en la mano, fue un momento devastador. Sufrimos muchísimo por aquellos días. 

El curso pasado a Ángel lo “echaron” de una guardería privada donde lo matriculamos la primavera anterior cuando no habíamos comenzado con el peregrinar hasta su diagnostico.

Lo entrecomillo no porque no sea cierta la palabra, sino porque se cuidaron mucho de que nos marcháramos voluntariamente y no emprendiéramos medidas legales.  Alegaron que podía perjudicar al grupo. Y eso que entonces pensaban que era hipoacúsico.

 La exclusión te marca para siempre. Yo sabía que aquello no era cierto pero desde entonces iba por la vida casi pidiendo perdón por molestar y con el miedo de que alguien nos dijera este no es tu sitio.

 Aunque nuestra actitud reflejaba fortaleza y decisión, no arrugándonos ante nada, en el fondo agradeces cada gesto de igualdad que se te ofrece porque lo elevas a la categoría de regalo cuando los demás  no se sienten afortunados de “pertenecer al grupo” porque “es lo normal”.

Cuando, aunque solo sea una vez, te niegan esa posibilidad solo porque eres distinto, es entonces y solo entonces cuando tú te sientes diferente.

A nosotros aquella nefasta experiencia nos sirvió para apreciar más si cabe lo que ahora disfrutamos.

Tengo todavía mucho que exigir, sobre todo a las administraciones públicas, muchos recursos que mendigar de puerta en puerta sabiendo que no son más que un derecho que a nadie pertenece más que a mi hijo.

Tengo todavía un largo camino por recorrer, pero este curso tenemos la suerte de haber encontrado personas maravillosas, extraordinarios profesionales que se implican en la inclusión de nuestro hijo superando incluso la falta de recursos por parte de la administración.

Como Lourdes, su PT, un regalo que este año nos ha tocado y por el que rezamos cada día para que nos dure mucho en el cole. La experiencia. Que adapta los materiales para Ángel, que lo sabe único y desde el primer día lo intenta escudriñar para exprimir todas sus posibilidades. Que conoce bien el autismo porque sabe que hay tantos como personas con autismo. Que lo divierte aprendiendo y le enseña el mundo haciéndolo sonreír.

Este año ha sido un Cumpleaños Feliz.

Ángel ha soplado las velas de la tarta, ha abierto los regalos y se ha hartado de jugar con ellos, ha bailado y aunque todavía no ha cantado la canción, aplaudió y grito ¡¡BIEN!! Y además se ha despedido de todos con un ADIÓS.

Pero además para mí ha sido muy feliz porque la tarde anterior celebramos una fiesta con sus amigos del cole.

Todos los niños y niñas de la clase lo acompañaron en su fiesta de cumpleaños y lo pasaron genial, jugaron juntos, bailaron cantajuegos y merendaron con magia. Le hicieron regalos y le firmaron una preciosa tarjeta de cumpleaños.

Y nosotros tuvimos la suerte de conocer a los papás y mamás de la clase, gente encantadora que nos contó cómo sus hijos les hablan de su amigo Ángel y compartieron con nosotros un café hablando de los peques que a mí me supo a gloria.

Muchos pensarán que esto es lo normal un día de cumpleaños, pero como he dicho para nosotros lo normal es un regalo.

Sabía que era mentira que mi hijo perjudicara a un grupo pero ahora puedo corroborarlo, y es gracias a la gente que estamos teniendo la suerte de encontrarnos en el camino.

Llevo todo el fin de semana suspirando, porque si en solo un año han cambiado tanto las cosas que no nos queda por conseguir en toda una vida.

Mi amigo Rafa me recordó la frase  del gran filósofo Buzz Lightyear: “Hasta el infinito y más allá”


FELIZ CUMPLEAÑOS MI VIDA.


7.1.12

El ángel les dijo: “No temáis, pues os anuncio una gran alegría,” (Lc 2, 10)

La Navidad era temida este año. El pasado fue un poco caótico, y este año hemos aprendido a ser pacientes y esperar la alegría de una buena reacción pero estar preparados para lo inesperado.

Será por eso que esta Navidad ha estado bien.  Hemos tolerado los cambios de espacio, de decorado, de horarios…

Son unas fechas muy complicadas, todo cambia, nada está en su sitio, los horarios varian y no solo en casa. Todo esta impregnado de Navidad, luces en las calles, música y villancicos, pastores, uvas  y relojes, Reyes Magos, regalos, árbol de Navidad… tremendo.

Pero este año nuestro Ángel nos dijo “no temáis”,  y las Navidades han sido sorprendentes.

Hemos disfrutado de la Nochebuena con los abuelos, su tía y su primo, después de un largo y cansado viaje que soportamos como campeones.

Visitamos la capital y pasamos un día maravilloso en el mercado navideño. El decorado nos encantó y las actuaciones en la calle nos hicieron llorar de la risa, literalmente, claro.

Cuando vimos el gran reloj en la tele lo reconocimos de inmediato. La noche de fin de año nos pusimos un poquito nerviosos porque la mesa en casa estaba colocada de otra forma a la habitual, pero conseguimos calmarnos y nos tomamos las uvas.

Bueno todos menos Ángel que decidió comérselas al día siguiente cuando el reloj de la cocina marcó las doce.

Se ve que entendió el mensaje pero necesitó más tiempo para procesarlo, fue divertido.

La Cabalgata de Reyes fue genial, aunque los nervios previos a la noche más especial del año hacían estragos.

Por la mañana los Reyes Magos habían visitado nuestra casa y el mayor regalo que nos trajeron fue ver a nuestros dos hijos abrir los paquetes de regalo, rompiendo papeles y sonriendo al ver las sorpresas y jugando con sentido.

Ángel fue corriendo a buscar a su Woody cuando vio que los Reyes le habían traído este año a Perdigón. Lo subió en su caballo y jugó a que trotaban. ¡Una maravilla!

Pero eso no fue todo, seguimos abriendo regalos en casa de los abuelos y los tíos y nos portamos de maravilla.

Las Navidades han sido agotadoras.

Ha terminado un año duro, que será doloroso recordar, del que hemos aprendido pero que ha sido muy difícil superar. Ya está vivido, solo nos queda recordarlo y aprender de él.

Ahora se nos abre la puerta del Año Nuevo, y nuestro Ángel nos dice de nuevo “No temáis, pues os anuncio una gran alegría”. 
Esperemos.
Vivamos el nuevo año disfrutando de todas las alegrías que seguro que nos esperan.

Y pidamos fuerzas para los días malos, para los malos momentos, que seguro que también los habrá pero como dice mi padre “solo necesitas hacerlo con la herramienta adecuada” ; pidamos tenerla a mano para cada momento.

Desterrar el miedo, ese es nuestro propósito para el 2.012. Y esperar siempre una gran alegría.